Mí historia comienza con muchos traumas, abuso sexual a los 4 años por parte de mi abuelo, violencia intrafamiliar, familia ligada a muchos patrones destructivos, alcohol, drogas, yo soy la menor de 4 hermanos, por cierto mis padres sólo pensaban tener 3 hijos, mis hermanos me llevan 13, 11 y 9 años de diferencia. Vivíamos una vida humilde, no carecimos de nada material puesto que mí papá trabaja arduamente para sostener nuestro hogar, casi nunca lo veía y cuando estaba en casa, casi todo el tiempo estaba alcoholizado, prácticamente fuimos criados por mí mamá, la cual siempre estaba ocupada en las labores domésticas y con un carácter un tanto inestable; la verdad ocasionado en parte por las tantas borracheras e infidelidades de mí padre.
En mí adolescencia comenzaron los desenfrenos sexuales por parte mía y mis transtornos de sueño, así como alimenticios, me salía de casa sin decir nada, tenía amistades destructivas, ahí comienza mí curiosidad y jugamos a la ouija con una amiga, con ella misma hacíamos invocación de espíritus, rituales con velas, lectura de cartas y hechizos de magia blanca, etc.
Mi cabeza tenía tantos pensamientos y la única instrucción espiritual en casa era la iglesia católica los domingos, largos sermones llenos de rezos repetitivos, iglesias llenas de imágenes y esculturas de santos, mis preguntas siempre eran,¿Dónde estaba Dios? ¿Por qué nos pasaban tantas cosas malas? ¿Dios existe?
Empecé a fumar y también a beber alcohol, mí mamá trás cada infidelidad de mí papá se iba a saber que le deparaba el futuro en sus lecturas de cartas, en alguna ocasión escuché a mí padre decir que en su juventud perteneció a los masones cuando estudiaba en Guadalajara, esa misma amiga con la cual hicimos tantas locuras fue la misma que me invitó a un retiro de 4° y 5° paso, al cuál fui en 3 ocasiones, de las cuales fue trás muchos años de diferencia, en el primero me sentí liberada y tuve la creencia que Dios sí existía, pero me sentía igual de vacía al paso del tiempo, en el segundo retiro fui después de la muerte de mí papá, sentí que ya no podía más, pensé en el suicidio después de verlo morir por un infarto al miocardio, sentí conexión nuevamente, efímero fue otra vez, entre en depresión y un primo me invitó al famoso couching vota 4, otra manera de hacerte ver que el poder está en sí lo crees, lo creas, salí empoderada y con ganas de comerme el mundo, pero habida por seguir sanando, samurai game le siguió, empieza mí gusto por la meditación y la cultura asiática, mí curiosidad por la reencarnación, comencé a tener un gusto especial por esas culturas orientales, a escuchar música hindú, canciones de krishna.
Pasó el tiempo y en enero del 2020 fui al último retiro de 4° y 5° paso, el padrino que llevaba a cabo la experiencia tras finalizar mí escritura, me tocó la cabeza y caí al suelo en una especie de trance, sentí que me sumía en la tierra, entre miedo y pensando que era Dios Padre continúe, había alabanzas y comencé a bailar, las personas eran como bolas de fuego y yo las tocaba y sanaban, cabe mencionar que en ese retiro tuve un golpe de la nada, nada físico me golpeó, pero sentí entre un golpe y un pinchazo en la espalda tan fuerte que al llegar a mí casa no pude levantarme en 1 semana, el doctor dijo que era lumbalgia, jamás entendí como podía hablar en lenguas y sanar personas y yo sentirme fatal físicamente al regresar, comenzó la pandemia en marzo del 2020 y con ello se frustró mí oportunidad de asistir a algún grupo de 4° y 5° paso para dar servicio como se acostumbra, en ese año seguí leyendo mis libros de Louise L. Hay, usted puede sanar su vida, el poder está dentro de ti, el yo soy de Saint Germain, encontré una página en internet donde ofrecían sanar mediante ayahuasca y bufo alvarius, medicinas ancestrales, me empezó a gustar las ondas de abrir el tercer ojo, viajes astrales, llaves tonales, meditaciones guiadas, páginas y páginas con textos llenos de palabrería inspiradora, todo eran frases y más frases, sentí que eran para mí la mayoría de ellas, comenzaba a ver números repetidos y despertaba a las 3 am, casi a diario, 11:11 dónde sea, diosidencias le llamaba, se intensifican mis ganas de sanar tras contagiarnos de covid-19 diciembre del 2020, en febrero 2021 me voy a mí retiro de sanación con las medicinas ancestrales ayahuasca, rapé, xananga, bufo alvarius… Aquí comienza el terror, me fui a otras dimensiones, en el centro estaba Jesús, a los lados buda y krishna, mí papá se despide a lo lejos de mí, de ahí comencé a hablar en lenguas nuevamente, me mostraron que venía de una estrella, que no era de aquí y que me hacía uno con el todo, todo era luz y amor, así intencioné la medicina, le pedía a Dios Padre sanar, dejar el pasado atrás, amarme.
Cuando regreso a casa siento una paz enorme, pero no podía dormir, sentía como mí cuerpo se hundía en la cama y mí espíritu se salía, comenzaron varias batallas y sueños que no lograba recordar, pero despertaba llorando y sintiendo que no podía despertar, parálisis tras parálisis del sueño, no podía comer, mí cuerpo vibraba mal, un temor a morir enorme, recurrí a otro grupo de 4° y 5° paso en busca de ayuda, comencé a orar, pero seguía sintiendo un pánico enorme a la oscuridad, peleas de mí espíritu con algo, con alguien.
Una tía cristiana con un padecimiento de esclerosis múltiple desde hacía casi 8 años enfermó de gravedad y me tocó cuidarla a petición de su hijo y accedí a ir, cuando llegue al hospital mí tía estaba muy mal físicamente, con llagas en las nalgas, una reciente cirugía en el abdomen para suministrarle el alimento, delgadez extrema, pero con una sonrisa que iluminaba la habitación completa, le puse alabanzas y videos cristianos, le dije que estaba retomando el camino de regreso a mí Padre celestial, que estaba en una agrupación de 4° y 5° paso y que había descubierto que hablaba lenguas y que sanaba, hice oración por ella y al otro día la dieron de alta, pensé tal vez funcionó, Dios le está dando la sanación; lo que retumbó en mí alma fue lo que me dijo con el tablero que usaba para comunicarse porque había perdido el habla, me dijo que lo único que no perdonaba Dios eran las blasfemias al Espíritu Santo, comencé a buscar en las redes sociales información y páginas que resolvieran lo que ella había dicho y di con esta página de Arella, fue un choque enorme de emociones, llanto, temor, desilusión, todo había sido un engaño del maligno, todo se caía a pedazos, los velos fueron removidos y clamé a Jesucristo vencedor, llamé a una amiga pastora, renuncié a todo lo que había hecho y por primera vez al estar con ella y sentir la vergüenza, la tristeza y el verdadero arrepentimiento por haber deshonrado a mí Padre Dios, experimenté un alivio y paz tan grande, inimaginable, que sólo proviene de Dios, de mí Padre Dios, Jesucristo me salvó, el pagó el precio de nuestros pecados en la cruz, su bendita sangre derramada por nosotros es la misericordia de Dios para el perdón de nuestros pecados, en ese momento comprendí que yo soy esa hija pródiga, regresando a los brazos de Dios Padre, Dios Hijo y Dios Espíritu Santo.
Porque este mi hijo muerto era, y ha revivido; se había perdido, y es hallado. Y comenzaron a regocijarse.
Lucas 15:24
Ahora entiendo por primera vez porque un versículo bíblico que me seguía durante muchos cobraría sentido.
Porque no nos ha dado Dios espíritu de cobardía, sino de poder, de amor y de dominio propio.
2 Timoteo 1:7
Al día de hoy sigo depurando mi hogar, quemando toda la idolatría, libros, imágenes, etc.
Pedí en muchas ocasiones fé, hoy entiendo que cuando pedimos algo habrá situaciones que nos hagan fortalecernos, el enemigo me alejaba de mí oportunidad de alcanzar la salvación y de reconocer a mí señor Jesucristo como el único y verdadero salvador, ahora entiendo que Dios jamás me dejó sola, mí libre albedrío me puso en esta situación, yo misma lo elegí, pero Dios jamás se fue, mí amado Jesucristo me rescató, el siempre estuvo al centro de mí vida hasta en las visiones, pero el ego desmedido por sentirnos superiores, por crear una realidad llena de opulencia y cosas materiales, por llenar los vacíos, comencé a alejarme de su presencia y a endurecer mí corazón, hoy perdono todo y a todos y reconozco que Amo a Dios con todo mi corazón, con toda mi alma y con toda mí mente y le pido misericordia por todas las personas que como yo estamos enfrentando estás batallas, la fuerza humana se acaba, pero la fuerza de Dios Padre es infinita y verdadera, busquemos cobijo y refugio sólo en Él, Jesucristo es mí rey, mí todo.
Yo soy el camino, la verdad y la vida, nadie viene al Padre, sino por mí.
Juan 14:6
Los amo en Cristo Jesús, gracias a todas las personas que llevan está amorosa y tan valiosa labor de compartir sus experiencias para ayudar a abrir los ojos y llevar de regreso al Padre a todos sus hijos e hijas pródigos, está es una forma de cumplir con los 2 primeros mandamientos de la ley de Dios.