Quiero compartir mi testimonio para que así como a mí me abrieron los ojos los audios que ustedes difunden y que llegaron a mí a partir de que pedí respuestas a Dios, pueda contribuir en la conversión de otras personas.
Llevo cerca de 7 años en una intensa lucha, todo marchaba estupendamente bien en mi vida hasta que un día sin más, una relación que para mi era la definitiva se terminó de forma inesperada, mucha tristeza inundó mi vida y un año después, exactamente el mismo día se terminó otra relación y de forma igual de dolorosa.
Cabe mencionar que el lugar donde trabajo, surgió la rivalidad con una compañera que está metida en el ocultismo y al recurrir a lectura de cartas me confirmaron que ella me había hecho un daño, en mi afán de salir de esa situación recurrí a limpias, veinte personas distintas me leyeron las cartas (tarot), uso de veladores, técnicas de la nueva era como constelaciones familiares, lectura de registros akashicos, rituales psicomágicos, limpieza de chakras, yoga, un par de clases de un curso de milagros y asistí a despojos del Templo Espiritualista Trinatario Mariano. Otras técnicas que practiqué fueron el hoponopono (incluso tomé un curso de eso), mantras, reiki, mandalas, terapias con ángeles, armonizaciones, temazcales, cuarzos (curso también), astrología (horóscopos y carta astral), uso de amuletos de protección, fui a una cátedra a un Grial con un Gurú muy extraño, lectura de mano, metafísica, limpias con santeros, endulzamiento de relaciones y estuve a punto de hacer toma de ayahuasca de no ser por el audio de Arella que me advirtió sobre las consecuencias. Como en la mayoría de las personas que caemos en esto, nunca hubo una mala intención en mí, ni deseos de dañar a nadie, por el contrario, sólo quería salir de esa racha en la que todo sale mal.
Llegué a pagar fuertes sumas para lecturas “en línea” con tarotistas reconocidos y en viajes a Cuba y Nueva Orleans también busqué lecturas de cartas.
Comencé a experimentar muchos conflictos con “amigas”, compañeros del trabajo, fui víctima de un fraude en donde perdí todos mis ahorros, accidentes automovilísticos, pérdidas materiales, proyectos frustrados, relaciones de pareja fallidas. En esto último quiero destacar que como bien dicen “la cuerda se rompe por el lado más débil” este tema de pareja se convirtió en mi “coco” y en mi surgió un temor enorme de quedarme sola, aunado a una frustración enorme, ya que “curiosamente” en todas las lecturas me auguraban próxima realización en el amor y al final las mismas personas que me lo habían asegurado a través del tarot me decían “ay pues siempre no, pero se ve que ahora sí viene el bueno” jajaja una cosa de locos! Ya que me había ilusionado y me entregaba de lleno en la relación con la idea de que todo se daría de maravilla, es decir, equivocadamente basé muchas de mis decisiones en lo que me decían en las lecturas….¡grave error!
Todo esto me llevó a relacionarme con un hombre divorciado que ya vivía en unión libre con otra mujer desde hace tiempo, porque aunque es algo que jamás me imaginé hacer por mis valores y principios, las cartas me aseguraban que lo tenían embrujado pero que en realidad él era mi alma gemela y deseaba estar conmigo, bah! El resultado fue un aborto y de ahí surgió un diagnóstico médico de un problema congénito y posible infertilidad.
La última experiencia dolorosa fue no hace mucho tiempo, a pesar de todo agradezco que haya sido el detonante para darme cuenta de la forma en que el demonio me tenía oprimida y si bien, sí creo que hay personas que busquen el mal de otras, esto se puede convertir en un círculo vicioso en el que el único que gana es el maligno; cuántas personas no habremos caído en sus redes en nuestro intento de salir de hoyo, terminamos abriendo puertas que nos hunden aún más.
Por consejo de un tarotista que sin duda me decía muchísimas cosas que terminaban ocurriendo (como parte del engaño, para ganar mi confianza) conocí por internet en una página de citas a un hombre que se vendió como un buen hombre, trabajador, responsable, sin vicios, un hombre de fe y con deseos de una relación formal… ¡wow! para mi era la respuesta a mis oraciones y pues ¡cómo no darme por completo si todo tal cual me habían dicho las cartas estaba ocurriendo! Yo estaba ilusionada y contenta aunque en el fondo, mi alma me decía que algo no estaba bien.
Ahora sé que eso fue una “relación orquestada” ya que es un hombre espiritualmente tóxico que a través de muchas mentiras y jugando con mi mente y sentimientos, terminó robando mi dinero y botando la relación sin explicación. Al principio el maligno crea un espejismo en el que te hace creer que todo va de maravilla: este hombre ya se quería casar, me presentó con su familia, conoció a la mía, aparentemente iba muy en serio pero terminó siendo un vínculo doloroso.
Al escuchar los testimonios de Arella Eliora me cayeron muchos veintes, ahora estoy en un proceso de conversión y es increíble cómo el camino al regreso a Dios se va mostrando paso a paso. Hoy por hoy los problemas siguen, las cosas en apariencia no han cambiado, pero yo ya no soy la misma, desde que renuncié a Satanás a través de la oración, se ha acrecentado mi fe y he consagrado mi vida a Dios, experimentando una paz y fortaleza como hace mucho tiempo no tenía. Hoy sé que estoy en el camino correcto y que lo que venga de ahora en adelante, vendrá de Dios y eso me da tranquilidad y confianza.
Y si bien es cierto que el chamuco (demonio) se alborota cuando comienzas con este proceso, en mi caso hice una oración de liberación en mi oficina y al día siguiente tuve una fuerte discusión con una compañera, pero recordé que son las patadas de ahogado del que ya no tendrá más influencia en mi vida. Siempre fui una mujer de fe y quizás por eso no fue peor mi experiencia, pero ahora soy consciente de que por un lado pedía liberarme y por otro lado invitaba más y más seres de obscuridad a mi vida.
Levítico 19:31
No os volváis a los espiritistas ni a los adivinos; no los consultéis ensuciándoos con ellos. YO SOY el Señor vuestro Dios.
Me gustaría que esto llegue a las personas que tal vez al igual que yo lo hice, piensen “el tarot no es nada malo, al final solo voy a que me den un panorama de mi vida y no busco hacerle daño a nadie” porque el daño se lo hace uno mismo. El demonio tiene cuatro formas de obrar: la posesión diabólica, la obsesión diabólica, la infestación diabólica y la vejación diabólica. Esta última es el caso de Job, que no estaba poseído sino gravemente golpeado en sus hijos, sus bienes y salud (Jb 1 y 2). Algunas personas se ven afectadas en sus afectos, su trabajo, salud, finanzas, relaciones, tal como me pasó a mí.
Con cariño, María Esperanza.